Formas de jugar

Las misiones son la forma más directa de avanzar, ya que te permiten adquirir experiencia, encontrar botines y ver qué te depara la historia del juego. Puedes embarcarte en ellas en solitario, invitar a tus amigos a que se unan o utilizar el sistema de matchmaking para hacer piña con otros jugadores.

Las aventuras más difíciles de Anthem son los baluartes. Se parecen a las mazmorras, pero son más largos y arduos. Están pensados para poner a prueba tus habilidades y vas a tener que dar lo mejor de ti mismo para superarlos. Eso sí: un gran esfuerzo se merece una gran recompensa y, en un baluarte, ser valiente se premia con creces. Como los baluartes son la prueba definitiva y solo los libranceros más veteranos pueden medirse con ellos, tendrás que reunir un equipo al completo si quieres vivir para contarlo.

Si quieres ir a tu aire por el mundo de Anthem, escoge una alabarda y sal a explorar por tu cuenta (o con más gente) en el modo de juego libre. Descubre secretos que quizás hayas pasado por alto en un combate o remueve cielo y tierra para encontrar materiales de fabricación o piezas de equipo. A medida que salgas a buscar objetos que te ayuden a fortalecerte para las batallas que se avecinan, te familiarizarás con el entorno y verás que la geografía de Anthem es realmente excepcional.