Los oficiales otorgan poderosos potenciadores a los soldados cercanos. Son los que mantienen al equipo unido y usan sus habilidades para ayudar a todos los que les rodean a luchar de forma más efectiva.

Los especialistas utilizan trampas mortales para hostigar a las fuerzas enemigas, revelan información del campo de batalla a sus compañeros y atacan al enemigo con armas de largo alcance.

Rápidos, duros y sumamente eficaces a corto y medio alcance, los soldados de asalto allanan el camino a sus compañeros y se abren paso a la fuerza entre las líneas enemigas.

Provisto de un escudo personal de gran resistencia, el soldado pesado es un coloso que domina el ataque y la defensa.